El running es un deporte cada vez más común y al que, con el paso de los años, se suman más y más creyentes. Es un deporte barato, ya que solo requiere de unas buenas zapatillas de correr y ropa cómoda. Además, no es necesario apuntarse a un gimnasio o academia; es un deporte muy sencillo de poner en práctica. Se puede empezar la ruta de running en el mismo portal de nuestra casa. Y ayuda a la quema de calorías, que es lo buscamos para mantener la línea, definir la musculatura o perder kilos. A esto hay que añadirle que ayuda a despejar la mente y a liberar el estrés acumulado en la universidad o en el trabajo. Son prácticamente todo ventajas, pero hay que seguir una serie de directrices sino queremos que aparezcan los inconvenientes.

No todo consiste en calzarse las zapatillas y lanzarse a las calles a hacer kilómetros. Hay que analizar muy bien desde el punto que partimos, y planificar bien los objetivos de tiempo y rendimiento. En el artículo de hoy os vamos a desvelar todos los secretos para iniciarse con éxito en esta disciplina deportiva y para que consigas lograr lo que buscas con el entrenamiento. Recuerda también que es fundamental que te pongas unos objetivos ambiciosos, pero también alcanzables.

• Empieza con poca distancia y a un ritmo adecuado a tu estado físico: antes de desarrollar este punto es conveniente recordar que las autoridades sanitarias recomiendan realizar un chequeo médico antes de comenzar a practicar cualquier deporte. Una vez tengamos la certeza de que nuestro organismo puede sobrellevar el esfuerzo, es cuestión de encontrar nuestro ritmo cuando corremos, un ritmo que nos permita respirar por la nariz y mantener el pulso cardiaco dentro de los límites. Igual que es importante el ritmo, lo es la distancia, porque no queremos padecer las dolorosas agujetas en los días posteriores. Si empiezas por correr 3 kilómetros, podrás ir aumentando gradualmente la distancia, semana tras semana. Eso, a su vez, hará que te motives mucho más, cuando empieces a cubrir distancias reseñables como los 10, 12 o 15 kilómetros.

• ¿Qué quieres conseguir? La meta es fundamental tenerla clara para preparar los pertinentes objetivos intermedios. Como bien es sabido, los objetivos son varios y solapados y la meta es una y final. Si el objetivo es perder grasa, la carrera continúa no es lo más recomendable según los expertos. En ese caso es mejor realizar series cortas pero muy explosivas. Si lo que queremos es despejar nuestros problemas y relajarnos a nivel mental, quizás nos baste con una carrera continua larga y a ritmo suave, mientras escuchamos un disco de Hurts en el iPod nano. Si lo que queremos es correr los 10 kilómetros en 45 minutos tendremos que intercalar días de entrenamiento de calidad con entrenos de rodaje para esquivar posibles lesiones.

• Acércate por la tienda Decathlon de GranCasa, situada en la planta baja de la galería comercial, y coméntale al responsable de la sección de atletismo tu situación. Esa persona te recomendará el material más adecuado a tus necesidades, a tu peso y a tus planes de running. En Decathlon tienes siempre a tu disposición los productos de primer precio técnico, que te permiten acceder a la última tecnología textil a precios muy asequibles. Esta línea de productos es ideal para todos aquellos que quieren iniciarse en un deporte ya que, hasta que descubran si les gusta o no, no es apropiado gastarse una fortuna en material deportivo de alta gama.

• Búscate un club de running para ir acompañado: ¿te cuesta horrores levantarte de la cama por la mañana y salir a correr? ¿O calzarte las zapas cuando llegas a casa después del trabajo y, sobre todo, ir solo a recorrer los senderos del parque? No te preocupes, en Zaragoza hay muchos clubs de corredores y algunos tienen diferentes niveles para que nadie se quede atrás. Consulta con alguno de ellos y seguro que pueden adaptarse a tu situación y tu nivel.

• Busca rutas bonitas y cronométrate: el sendero es importante, más de lo que te puedas imaginar, y se recomienda variar para no caer en la monotonía. Si controlas tus tiempos será mucho más fácil mejorar, y además será un plus de alegría, porque para un runner no hay nada mejor que arañarle unos segundos al crono.

Queda claro que para comenzar a dar zancadas es mejor planificarse, especialmente para evitar las siempre incómodas lesiones, que se presentan con más facilidad cuando se sale a correr sin una preparación o sin el material adecuado.