El otoño es la cuarta estación completa del año. Obviando la postrera semana de diciembre, ocupa los últimos meses antes del cambio de dígito que acontece en la velada de Nochevieja.

Reconocemos que es una estación que está mal situada a nivel psicológico. En otras palabras, tiene cierta desventaja cuando se trata de que la gente se encariñe con esta estación del año. Ocurre justo después del verano, que es una época asociada a la playa, a las vacaciones, a los viajes y a las terracitas. Además, el otoño marca el comienzo del año universitario y del regreso al puesto de trabajo. Además, comienza a refrescar con frecuencia, sobre todo por la noche. Por eso, es conveniente llevarse una rebeca bajo el brazo cuando salimos a cenar.

Pero al margen de estos inconvenientes, vamos a enumeraros todas las cosas buenas que esta estación también trae con ella:

• Que refresque, no tiene que ser siempre un inconveniente: las temperaturas de verano permiten darse chapuzones en la playa y en la piscina. Pero estamos más que seguros de que, en algunos días de bochorno, cuando el termómetro se acerca, o incluso superar la barrera de los 40, no te gusta el exceso de grados centígrados. En otoño ese problema se ve notoriamente reducido porque el año avanza de forma irremisible hacia el invierno.

• Te permite mimar tu higiene del sueño: si durante el verano o las vacaciones has llevado los horarios propios de las semanas de ocio, ahora en otoño es mucho más sencillo recuperar la rutina. De este modo es más fácil cumplir a conciencia con tus horas de sueño (las ocho horas que recomienda siempre el personal sanitario). Cuando lleves esto a la práctica te notarás mucho más descansado y rendirás mejor en tu trabajo.

• Haz deporte: todos, de vez en cuando, necesitamos un acicate. Por ejemplo, alguien que nos espolee para realizar algunas actividades. La actividad física entra dentro de ese grupo y en otoño es muy habitual tener a alguien en nuestro entorno que arranque con un plan de entrenamientos, se apunte al gimnasio o comience a correr por las mañanas. Súbete a su barco y empieza a quemar calorías aprovechando que en otoño empezar a hacer deporte es una moda muy extendida. También puedes acercarte por el gimnasio para preguntar por las promociones que tienen vigentes a lo largo de este mes porque suelen lanzar muchas ofertas.

• Productos de temporada: además de las manzanas, los higos y el melocotón tardío, hacia el final del invierno llegan las mejores naranjas del año. Y, como no, hay que reseñar que es la estación de las setas, y es un gran momento para iniciarse en la micología. Infórmate sobre las setas comestibles que crecen en los alrededores de tu ciudad y empieza poco a poco a aficionarte a esta antigua tradición. Es importante que solo las cocines si estás al 100% seguro de que coincide con la seta comestible ya que, a veces, hay especies venenosas que se parecen mucho a las comestibles. Nuestro mejor consejo es que te inicies en compañía de alguien que ya haya realizado esta actividad con anterioridad. En la micología, la experiencia es un grado.

• Los bosques se visten de gala: las mejores fotografías de bosque son captadas en pleno otoño, cuando los naranjas, amarillentos y rojizos tiñen las hojas de los árboles caducifolios. En ese momento el bosque verde se convierte en un precioso lugar de cuento. Cerca de Zaragoza tenemos el bosque del Moncayo con miles de hayas y robles. En la comunidad autónoma vecina, Navarra, está la famosa Selva de Irati, que es realmente increíble en el periodo otoñal.

• Una gran época para marcarte objetivos de todo tipo: al margen de marcarte un objetivo de rendimiento deportivo que puede ir desde la tonificación o un reto concreto en una carrera popular, y que ya hemos mencionado antes… Ahora es un gran momento para dejar de fumar, comenzar un régimen de alimentación más saludable o reducir el consumo de alcohol de forma drástica. También para empezar a estudiar aquello que siempre se quedó en el tintero (un nuevo idioma, un posgrado, un título propio de una universidad, etc.) A nivel mental, al regreso de las vacaciones, nos encontramos en el momento idóneo para arrancar con un nuevo reto o proyecto porque tenemos las baterías con energía acumulada.

En el artículo de hoy os hemos dado hasta seis motivos que quizás desconocías por los que el otoño es una excelente estación del año. Quizás hay que dejar de catalogar como tristona a esta estación tan solo basándonos en la hojarasca que cubre las aceras, en el regreso de las bajas temperaturas o en que empieza poco después del final de las vacaciones de agosto. Empieza a mirar el otoño con otros ojos, es una cuestión que depende únicamente de ti.