Hoy es el día de San Valentín y es momento de hablar del amor. El amor es un sentimiento inherente al ser humano y es fuente de beneficios. Está demostrado que mejora las relaciones humanas y, aunque a veces nos hace sufrir, nos regala también mucha felicidad y momentos inolvidables.

Detrás de las sensaciones que provoca el amor, la ciencia ha identificado a unas responsables principales. Se trata de las reacciones químicas que tienen lugar en el cerebro y a través de las que liberamos feromonas, endorfinas, serotonina y oxitocina. Un cóctel de felicidad creado en el hipotálamo por nuestro “barman” personal.

Ya dijo en su momento el ilustre Eduardo Punset que “la esencia del amor sigue igual que en el comienzo de los tiempos”. Las parejas de homo erectus que se relacionaban en la Prehistoria y en los albores de la civilización tenían sentimientos de amor muy similares a los del ser humano de la actualidad.

La pasión entre las especies animales se basa en los instintos, mientras que en el caso de los humanos se modula y se regula desde la conciencia y el raciocinio. Este factor que entra en juego hace que las relaciones humanas amorosas a veces no resulten nada sencillas.

El primer investigador que le dio una importancia capital al sentimiento en la historia de la Humanidad fue Charles Darwin. Además de la lucha por la supervivencia, el amor ha sido clave para determinar qué parejas de humanos emprendían su camino juntos y decidían engendrar descendencia. Así que se puede confirmar, sin ningún género de dudas, que el amor ha cambiado la historia del ser humano.

La fórmula mágica que hace posible el amor. ¿Conocías su existencia?

La comunidad científica, ante la relevancia de este sentimiento que como dice el dicho popular “mueve montañas”, ha desarrollado una fórmula: L = 8 + 5Y – 2P + 9Hm + 3Mf + J – 3G – 5(Sm – Sf) 2 + I + 1.5C

Procedemos, a continuación, a explicar las variables para poder darle sentido a esta sucesión de cifras y letras.

• L: es la duración prevista a priori para la relación, en años, y esto es fundamental. Llega un momento en la vida de la mayoría de las personas en el que se busca algo más serio, un compañero con el que compartir la vejez.
• Y: representa el número de años en los que se han estado conociendo los dos conformantes de la pareja antes de iniciar una relación amorosa a largo plazo.
• P: aquí se recogen el número de parejas anteriores que suman las dos personas y es que es básicos comparar y saber los defectos y virtudes de cada tipo de carácter.
• Hm: esta es la importancia que el hombre le atribuye a la honestidad y lealtad en la relación de pareja.
• Mf: por otro lado, se recoge la importancia que la mujer le atribuye al dinero en una relación.
• J: la siguiente variable es el peso que ambos le atribuyen al sentido del humor (deben de sumarse ambos guarismos)
• G: la relevancia que ambos le atribuyen a la apariencia física y también deben sumarse ambas cifras.
• Sm y Sf: la importancia que el hombre y la mujer le atribuyen al sexo.
• I: la importancia que se le atribuye a tener buenas relaciones con los familiares de las respectiva pareja.
• C: el peso en suma que le atribuyen a tener niños.

Al margen de esta fórmula, hay que añadir que todas las personas no tienen idénticas motivaciones y que la ciencia intentó buscar un estándar en esa fórmula, pero sin descartar que las relaciones de amor puedan tener lugar en otro tipo de configuraciones y caracteres.

Demuéstrale lo que le quieres en este día tan especial

El día de San Valentín es un buen momento para regalarle a tu pareja unas flores, el disco del momento, una escapada de fin de semana o el libro que te conquistó el pasado verano durante las vacaciones. Hay muchas opciones de regalo de enamorados, pero seguro que tú conoces mejor que nadie sus gustos.

Además de salir a cenar por ahí, también existe la opción de preparar una cenita romántica en casa con velas, un vino tinto gran reserva, foie de oca, queso brie, langostinos al ajillo hechos a la plancha, cóctel de gambas etc. Haz que sea especial, como si fuera una cena navideña. Y lo mejor es organizarlo todo sin que la otra persona se lo espere.

Así, cuando llegue de trabajar, debe encontrarse toda la casa en penumbra, solo iluminada por la fluctuante luz de las velas, la chimenea encendida y una canción sugerente sonando a modo de hilo musical. El resto de la historia ya la escribís vosotros. Este año cae en lunes, pero es una excelente forma de comenzar la semana ¿no creéis?