La constante evolución que vive el mundo de moda no ha dejado de sorprendernos temporada tras temporada. Poco tienen que ver las reglas y cánones actuales con las creaciones de hace un siglo. Eso sí, lo que no ha cambiado por mucho que pase el tiempo es el carácter rompedor de los diseñadores, que no han dejado de sorprendernos con sus creaciones.

No cabe duda de que la historia de la moda podría resumirse en ciertos momentos icónicos e inolvidables que marcaron un antes y un después tanto en la moda como en el cine. Desde GranCasa queremos hacer un recorrido por las imágenes de moda más representativas que pasaron a la historia.

Los looks más arriesgados

Quizás no te suene su nombre en un primer momento, pero si te decimos que Jean Shrimpton dio el pistoletazo de salida a la minifalda quizás comiences a cogerle más cariño. Y es que precisamente el valor que mostraron algunas mujeres en aquellos años en los que no estaba bien visto mostrar más piel de la necesaria, ha hecho que hoy en día podamos mostrar nuestras piernas sin reparos.

La aparición de Jean Shrimpton en la Copa Victoria de Melbourne con un vestido mini, portando un pequeño bolso, sin guantes ni sombrero, causó un gran revuelo que dio paso a una época dorada de la minifalda. Hechos como este llevaron a la actriz inglesa a convertirse en un icono de estilo en los años 60, una de las primeras supermodelos de la historia.

Por otro lado, ¿alguien puede olvidar el diseño de Jean Paul Gaultier que lució Madonna en los 90? El bustier de conos en un tono dorado dio la vuelta al mundo rompiendo con todo lo establecido. Dicho look fue diseñado en exclusiva para la gira ‘Blonde Ambition’ de la cantante. El corsé con conos puntiagudos cosido en lamé vintage de 1930 y pantalón de raya diplomática fue diseñado en 1982,  inspirado en los sujetadores puntiagudos de los cuarenta y cincuenta que lucían estrellas como Marilyn Monroe.

Desde entonces han sido muchas las artistas que han querido rescatarlo. Desde Lady Gaga, pasando por Rihanna, Kylie Minogue o Katy Perry, entre otras. Además, el propio Gaultier lo revisitó en su colección de 2010 y en la cápsula que diseñó para La Perla.

El esmoquin también es para las ellas

¿Quién iba a imaginar en los años 30 que el vestuario de una película iba a acabar despertando una revolución en el mundo de la moda? Sino que se lo digan a Marlene Dietrich, protagonista de la película ‘Marruecos’. Un sombrero de copa, una pajarita y un esmoquin fueron suficientes para que la actriz se convirtiera en un icono de la moda en Hollywood. Tanto es así, que logró su primera y única nominación al Oscar a pesar de protagonizar una de las escenas más escandalosa de la época, con el beso que le daba Dietrich luciendo su chaqué con su a una mujer en una sala de fiestas. Lo más importante del efecto que generó este estilismo masculino es que abrió la veda en el uso de pantalones por parte de las mujeres.

El desayuno con diamantes de Audrey Hepburn

Nunca un desayuno ha dejado tanta huella como el que protagonizó la actriz Audrey Hepburn en la madrugada de un día cualquiera en la Quinta Avenida. Ataviada con un impecable diseño negro, un collar repleto de perlas, un recogido alto y unas gafas de sol, se acerca al escaparate de Tiffany entre sorbos a un café y pequeños mordiscos a un croissant.

Quizás sea la sencillez de la escena, de apenas dos minutos de duración, la que hace precisamente que apreciemos la elegancia innata de esta mujer, que despide la noche embelesada ante el brillo de los diamantes. Lo cierto es que la fórmula Audrey y Givenchy se convirtió en una alianza inquebrantable que ha pasado a posteridad.

Estos son solo algunos de los grandes momentos que han marcado un antes y un después en el mundo de la moda. Muchos de ellos se han convertido irremediablemente en una inspiración para las tendencias más actuales. Por ello, desde nuestro Centro te invitamos a conocer las mejores ofertas en moda y complementos que podrás encontrar en las tiendas de GranCasa.