La película original de Regreso al Futuro acontecía en el año 1985, pero en dicho filme, es conocido por todos que los protagonistas realizaban un viaje al futuro cercano. Pues bien; ese futuro cercano, es hoy pasado. En teoría, el 21 de octubre de 2015 fue la fecha en la que Marty McFly regresó al futuro. Cada 21 de octubre esperamos a ver si fue un error de cálculo… pero, de todas formas, lo que más nos apetece es especular con lo que se encontraría Marty McFly si viajara hasta nuestro 2022, con respecto a nuestro 2015.

En estos siete años muchas cosas han cambiado, pero otras se mantienen exactamente igual:

-El gran acontecimiento de este septenio, sin lugar a dudas, ha sido la pandemia de Coronavirus que se ha extendido por todo el planeta causando 15 millones de muertos de forma directa o indirecta. Esta cifra, que estima la BBC, prácticamente duplica la cifra oficial de la OMS. Hasta el 2020, los sucesos sobre epidemias y contagios parecían un problema de otras épocas. Incluso muchos nos sorprendimos al comprobar que nuestras vetustas Cartas Magnas tenían ya contemplados unos estados de alarma, excepción y sitio para las contingencias más perturbadoras a las que se puede enfrentar un Estado. Sea como fuere, hace poco más de dos años y medio, todos sufrimos una de las crisis sanitarias más duras del siglo XXI. Marty McFly vería con sus propios ojos a una sociedad más tendente a la depresión y a los ataques de ansiedad por culpa de la pérdida de seres queridos, el incierto futuro económico y la ausencia de normalidad durante muchos meses.

Imagen: unsplash

-Seguramente se sorprendería al comprobar que Donald Trump, el excéntrico constructor que ya reinaba en la Quinta avenida en 1985, había llegado a ser presidente de los Estados Unidos de América. Y lo que es aún más alucinante: que es firme candidato a la candidatura republicana de 2024, a pesar de que la turba entró en el Capitolio en 2021 alentada por sus reclamaciones de fraude electoral tras la derrota ante Biden.

-Otro punto triste a tener muy en cuenta sería que Rusia está en guerra con Ucrania, aunque en 2015 ya había tenido lugar la adhesión de la región de Crimea.

-Por último, también se daría cuenta de que, en 2022, los coches eléctricos ya no son mero artilugio de ciencia ficción o una rareza en las carreteras, sino que circulan con normalidad por las calles de todo el planeta. Los coches no vuelan, pero, por lo menos, hay algunos que contaminan un poco menos que los vehículos de combustión.

Imagen: unsplash

Tras estos cuatro puntos clave en los que mezclamos la actualidad con la política, llega el momento de sumergirnos en aspectos un poco más concretos sobre nuestra historia reciente.

Miscelánea sobre el septenio 2015-2022

Vamos a recoger algunas trivialidades, frikadas y otras curiosidades que han acontecido a lo largo de los últimos siete años.

El viajante al futuro se hubiera horripilado en 2015 al comprobar que Estados Unidos no tenía operativa una nave espacial tripulada apta para un vuelo orbital, tras el retiro de los transbordadores. Ahora, en 2022, USA tiene la Dragon 2, de la compañía privada Spacex, y va a lanzar la CST-100 Starliner y la Orion tripuladas en menos de 6 meses. El camino hacia Marte sigue estando muy lejano, pero no se descarta volver a pisar la Luna antes de que acabe esta década.

Imagen: unsplash

McFly podría informarse acerca de que Nico Rosberg, el hijo de Keke Rosberg (un famoso piloto que competía en Fórmula 1 allá por el año 1985), se alzó con el título mundial de esta disciplina en 2016, justo antes de retirarse del deporte para siempre.

En cuanto a los avances en el campo de la genética, se hubiera quedado prendado al descubrir que los planes de clonación de especies extintas de Revive&Restore, que eran meros anuncios hace 7 años, ya son una realidad. La paloma migratoria (extinta en 1914) y la gallina de los brezales (extinta en 1932) tienen ya en marcha dos ambiciosos proyectos de desextinción que ya han alcanzado la fase 2. La biogenética ha avanzado mucho en el último lustro y quizás en el futuro, las alcas gigantes puedan volver a surcar el Atlántico Norte en plena libertad y sin ser perseguidas hasta la extenuación. Y, ¿por qué no? Las vacas marinas de Steller podrían bucear con sus majestuosos cuerpos por las costas de Kamchatka… Hay que dejar volar la imaginación, sin olvidarnos de preservar la biodiversidad y de proteger a todas esas especies amenazadas que figuran en la lista roja de la UICN.

A pesar de la pandemia, de la guerra, y de otros problemas de índole climática, la Humanidad está tomando conciencia y esperemos que Marty McFly, cuando regrese al futuro, se encuentre con una población más evolucionada.