Tranvía, coche, bici, patín, andando… No nos cansamos de repetir que nuestro centro comercial es el único centro de compras de la ciudad con tantos y tan buenos accesos. Es por eso que nos gusta recordarles a los usuarios cuáles son las bondades de usar los distintos medios de transporte, desde el más eficiente y limpio hasta la comodidad del coche personal, pasando por el método más saludable que es caminar desde el centro de la ciudad por la ribera del Ebro.

Cuando abrimos las puertas a mediados de los años 90 conseguimos posicionarnos de forma muy potente en la mente de los zaragozanos porque el barrio del Actur, con su generación de familias jóvenes de clase media, ya estaba muy bien comunicado con los autobuses de línea. A comienzos del siglo XXI, la situación mejoró notablemente con el tranvía, que conecta toda la ciudad de punta a punta, pero además hay otros servicios como el bizi o los patinetes eléctricos que tan rápido se han extendido desde 2019.

Al final, la cercanía del centro es un plus a nuestro favor y queremos desglosar punto por punto los distintos modos de acudir a practicar slowshopping.

Formas de llegar a GranCasa de manera rápida

• Tranvía: este medio de transporte es todo un emblema de la ciudad desde su inauguración. Une Valdespartera con Juslibol y cada día lleva a miles de personas a su trabajo o de regreso a su hogar. Con la Plaza de España nos separan solo 6 paradas de tranvía, de la Plaza del Pilar tan solo 4, y del estadio de la Romareda una docena. De esta manera, con un breve viaje en tranvía te plantas en los cines Cinesa, en el foodhall más molón de la ciudad o en el outlet de El Corte Inglés, que tantas gangas esconde en su interior.
• Autobús urbano: el método tradicional, sigue siendo muy funcional en direcciones distintas a la línea de tranvía. En primer lugar, están los dos circulares Ci1 y Ci2, que nos lleva n a puntos neurálgicos como la Plaza Mozart o como la Estación de tren intermodal delicias, en la que también se pueden coger autobuses hacia todos los puntos de España. Además, la línea 23, que une Parque Venecia y el Actur-Rey Fernando, el autobús que llega al corazón de Juslibol, el 44, que lleva a la Estación de cercanías Miraflores, el 42 que nos lleva hasta La Paz o el 50, que une el mítico barrio de Vadorrey y San Gregorio.
• Las bicicletas personales son también una gran elección si nos preocupa el medioambiente, pero además hay servicio de Bizi, con parada de las características bicicletas rojas que pertenecen al municipio. En concreto, hay dos estaciones, una en la calle Clara Campoamor y otra en la Avenida María Zambrano. Si quieres ponerte las piernas un poco fuertes y ahorrar el dinero del billete, acudir en bici es la mejor forma porque ahora hay carril bici en Gómez de Avellaneda y el María Zambrano, por lo que es muy seguro pedalear en las inmediaciones del shopping center.

Imagen: Heraldo

• Patinetes eléctricos: los patinetes son limpios, ágiles y prácticos, aunque hay que estar muy atento a la conducción del mismo porque es fácil perder el equilibrio. Por lo demás, si te manejas bien con este transporte, pronto descubrirás que te lo puedes llevar a muchos sitios y realizar la carga cada noche en la tranquilidad de tu hogar. Si no es un patinete privado sino uno de alquiler, entonces lo puedes dejar en un sitio en el que no moleste y te cobrarán un módico precio por el uso del mismo.
• También el coche personal, o una moto o ciclomotor son opciones muy adecuadas si vas con prisa, ya que puedes acudir al parquin cubierto, en el que son gratuitas las tres primeras horas entre semana, y totalmente gratis en sábados y festivos. Es un aparcamiento que tiene servicio de app para localizar el coche con celeridad, estacionamientos para familias, plazas para minusválidos, zonas de recarga de coches eléctricos, taller mecánico e incluso un lavadero de coches. De esta manera, puedes aprovechar tu tiempo de compras para dejarlo impoluto, para realizarle un cambio de aceite o para revisarle los niveles antes de pasar la temida ITV.
• Para terminar, hay que mencionar la última opción que se nos ocurre para acudir al centro y es caminar desde el centro, paseando tranquilamente por la orilla del Ebro. Ahora en invierno quizás no apetece, pero en cuanto llegan los calores de la primavera, es un verdadero placer contemplar el río más caudaloso de España y cruzarlo por la Pasarela del Voluntariado. Toda una forma de llegar más relajado a la galería para practicar el slowshopping y saborear a tope una tarde de compras.

Imagen: Heraldo