Los residuos son el mayor problema de las sociedades avanzadas en el siglo XXI. En la actualidad, los seres humanos producimos a nivel mundial un total de 2100 millones de toneladas de basura al año y algunas instituciones como el Banco Mundial ya auguran que en 2050 estas cifras aumentarán en un 70%. Esta carrera imparable va a terminar por contaminar hasta el último rincón del planeta Tierra y, además, va a consumir un exceso de recursos, tanto fósiles como naturales. Este tipo de comportamiento, consecuencia del arraigado talante consumista de nuestra sociedad actual, va a acabar por repercutir en la salud de los seres humanos, en la biodiversidad, en el ecosistema y, finalmente, en nuestra calidad de vida.

Japón, Estados Unidos y Alemania son los países más exportadores de basura del mundo, y los mayores receptores son Malasia, Tailandia y Vietnam. El principal importador de basura fue China, durante muchos lustros, aunque en 2018 tomó la drástica decisión de restringir la recepción de residuos exógenos.

Hoy es el Día mundial del reciclaje

La Humanidad evoluciona hacia un modelo en el que cada nación soberana se tendrá que hacer responsable de sus propios residuos.  En esa ecuación de difícil solución, el reciclaje ocupa un papel fundamental. En la actualidad, de las 2100 millones de toneladas anuales de residuos producidas a nivel global, tan solo se recicla el 16% (alrededor de 1 de cada 6 kilos de basura). Debería ser una meta a corto plazo duplicar esa cifra de reciclaje, si queremos seguir una política de gestión de residuos más sostenida y respetuosa con el medio ambiente.

Por este motivo, el 17 de mayo se celebra el Día Mundial del Reciclaje, con el objetivo de concienciar a los seres humanos de la importancia del reciclaje. La fecha fue auspiciada por la UNESCO en 2005 con la premisa clara concentrada en tres palabras: reducir, reutilizar y reciclar. La fecha fue fijada inicialmente en el año 1994, pero no se consagró institucionalmente hasta una década después. Es un día que, en la actualidad, se promociona tanto en sectores públicos como privados y cada vez son más los países que se unen, promoviendo actividades, jornadas de concienciación en colegios y talleres.

Consejos para reciclar en casa

Muchas son las personas que dicen no tener un método para reciclar sus residuos en su vivienda y es tan solo cuestión de poner un poco de interés y algo de esfuerzo.

Básicamente, en el día a día hay productos para reciclar de consumo cotidiano que vamos a separar en 4 grandes bloques, de los que queda al margen la basura orgánica:

• • Plástico: envoltorios de galletas, tetrabricks, bolsas, botellas, etc. Hay que recordar que las mascarillas, aunque están hechas de plástico y polímeros, se consideran no reciclables.
  • Papel: periódicos, cajas de pizza, etiquetas, revistas, documentos sin información confidencial, etc.
  • Pilas: muy importante. Las pilas contienen mercurio, cadmio y otros compuestos químicos bioacumulables que deben estar alejados de la cadena trófica y de la naturaleza.
  • Vidrio: botellas de vino, botellines de cerveza, frascos y envases de legumbres.

Otros residuos que debemos reciclar

Aparte de estos, que son más habituales, hay residuos más puntuales como sartenes (con PFOA en muchas ocasiones) pequeños electrodomésticos, aceite de oliva usado o mobiliario, que se deben llevar a un punto limpio. Con la ropa que queremos renovar, lo mejor que podemos hacer es donarla a alguna de las organizaciones que se encarga de recepcionarla, clasificarla y repartirla entre los más desfavorecidos.

• Conciencia a los tuyos: especialmente si son pequeños, educarlos en el hábito del reciclaje puede ser un bonito valor a inculcar, que llevarán consigo el resto de su vida. Los otros miembros de tu familia, si interiorizan el hábito de reciclar, también puede ayudarte a generar menos residuos.
• Elige un sitio para el reciclaje: no tiene porqué ser en un lugar centralizado. Lo ideal es poner el cristal, el aceite de oliva usado y el plástico en un mismo lugar cerrado (los bajos de un armario de la cocina, por poner un ejemplo), las pilas en el recibidor y el papel en el armario empotrado de la entrada. Una vez hayas cogido la costumbre de ir distribuyendo los residuos, verás lo fácil que es aportar nuestro pequeño granito de arena al cuidado del medio ambiente.
• Intenta comprar productos con poco plástico. Cada vez son más las marcas que anuncian en el envoltorio de sus productos el número de capas plásticas del envase. Si escogemos productos que generen menos residuos serán mucho más sencillo reciclarlos.

El futuro del planeta está en nuestra mano

Reciclar debe ser uno de los cometidos y tareas diarias que cada persona debemos ponernos como obligación si queremos tener un mundo más limpio en el futuro. Millones de toneladas de plástico terminan cada año en los océanos porque no se gestionan de forma adecuada. Si se reciclaran, se ahorrarían muchísimos recursos naturales y evitaríamos el sufrimiento de muchas especies marinas. Por eso, como Hoy es el Día Mundial del Reciclaje, hacemos un llamamiento a todas las personas para que reciclen hoy y siempre.